Volviendo a la importancia del juego largo/juego corto y para defender mi tesis, os pongo mi vuelta en El Encín el sábado. Hándicap 30,3 que de juego daba 36, es decir 2 golpes en todos los hoyos.
En el tee del hoyo 16, con un juego largo bueno (para mi nivel) y un juego corto malo (1 cuatripateo y 4 tripateos) ya tenía 38 puntos y quedaban 3 hoyos por jugar. Digo juego largo bueno porque para ser hándicap 30, había cogido 10 calles de 12 y había cogido 4 greenes en regulación. Pues bien, llegado a ese hoyo, se me descojona el juego largo (hierros largos y maderas) y sólo sumo 2 puntos en 3 hoyos. En esos tres hoyos hago 6 putts (3, 1 y 2) y aprocho bien, pero no me sirve para nada porque me he liado con el juego largo…
Pues eso, que si me preguntas a mi, te diré que, tal y como juego de mal, cuando me funciona el juego largo hago pocas (para mi hándicap) con independencia del juego corto, pero que cuando no me funciona el largo me como los mocos…
El ejemplo más paradigmático de la vuelta es la comparación entre el hoyo 1 y el 17.
Hoyo 1 (par 5): green de 3 + 4 putts = 7 golpes y 2 puntos
Hoyo 17 (par 4): a 50 metros de green de 6 golpes. Approach de 50 metros y putt de un metro que emboco = 8 golpes y 0 puntos
