Allí estuvimos presentes y os garantizo que ver a un gran amigo destrozando el campo es una sensación espectacular.
Son muchos los detalles que podría contaros de las mas de cinco horas que estuvimos disfrutando ayer pero lo esencial es que en ningún momento se vieron agobios ni mosqueos y nos dedicamos a divertirnos y sobretodo a que Miguel disfrutase a nuestro lado. Se mascaba la machada.
Nos reímos muchos y jugamos muy tranquilos. Ojo, todavía mas valor si cabe, hacia un viento del carajo.
El señor de Barcelona (muy majo) intento cambiar su partida antes de salir porque no nos conocía de nada y nosotros estábamos de coñá desde el tee del hoyo 1. Empezamos con birdie, par y par y el tío se quedo


Miguel, eres genial y me alegro de haber estado a tu lado en el que es hasta la fecha tu récord personal en un campo de golf.
Nakio y yo nos quedamos con las ganas de ver tu primer 69

Un abrazo.